La exploración física en las consultas médicas:
Lo que nadie antes le había contado sobre su valor real
- Equipo del ICADig
- Noviembre 2022
- Telemedicina
Suscríbete a nuestra newsletter
Las consultas online y la exploración física
En medicina, los pilares fundamentales de una buena atención son la entrevista clínica dirigida y el examen físico. Por ese motivo, una de las principales dudas que les surgen a los pacientes a la hora de solicitar una consulta online es si el médico les podrá atender adecuadamente sin realizar una exploración física.
Lo cierto es que la necesidad de convertir una consulta online en presencial para realizar una exploración física es relativamente infrecuente. En estudios recientes solo una fracción de las e-consultas en la especialidad de Aparato Digestivo precisaron convertirse en presenciales.
A continuación, explicamos cuál es la utilidad real del examen físico. Lo que viene a continuación le resultará sorprendente.
Exploración física, tecnología y diagnóstico médico
Es un hecho que la medicina moderna se apoya en la tecnología. De hecho, para la mayoría de las enfermedades que nos afectan existe alguna prueba o test que precisa de algún dispositivo tecnológico. Este puede ser relativamente simple como un analizador en un laboratorio o tan complejo como un PET-CT en un servicio de radiodiagnóstico.
Cuando hablamos de la precisión de una prueba para confirmar o descartar una enfermedad se suele pensar en aquellas que nos han llegado gracias al desarrollo tecnológico. Sin embargo, la evidencia sobre el valor de la exploración física como método diagnóstico es mucho más escasa.
La exploración física abdominal: Una tradición
Antes de que tuviéramos disponibles pruebas de imagen, la inspección (ver), auscultación (escuchar), percusión (detectar los cambios del sonido en función de su composición) y palpación (tocar) del abdomen se consideraban esenciales. Era la única forma de detectar tumores, dilataciones de los grandes vasos abdominales (aneurismas) o aumento de tamaño de órganos como el bazo, el hígado o la vesícula biliar.
Palpación de órganos abdominales: ¿cuál es la precisión de la exploración física?
Tendemos a pensar que lo que detectamos a través de nuestros sentidos constituye una percepción adecuada de la realidad. Sin embargo, se ha demostrado que, cuando un médico explora el abdomen de un paciente y evalúa, por ejemplo, el tamaño de su hígado con la exploración física, el facultativo tiende a infraestimarlo. Esto es, detectamos que mide menos de lo que en realidad mide. Es más, cuando realizan esta exploración dos médicos distintos, hay una marcada diferencia en la medición y, por si fuera poco, el dato obtenido se correlaciona mal con la medición que se obtiene con una ecografía.
Situaciones similares se dan con la exploración de otras enfermedades del abdomen como las que cursan con aumento del tamaño del bazo o la dilatación de la aorta (aneurisma). En estos casos, las pruebas de imagen como la ecografía o el escáner son la referencia.
Escuchar los ruidos del intestino: ¿Es de utilidad?
La interpretación de la auscultación de los ruidos intestinales, una parte habitual de la exploración física abdominal, es todavía más compleja. Los ruidos normales varían de intensidad, tono y frecuencia en condiciones normales y aumentan con la ingesta alimentaria. Además, cursan en ciclos de 50 – 60 minutos. Por tanto, el análisis que de ellos hace un médico que ausculta el abdomen durante unos pocos segundos, a la cabecera de un paciente, puede proporcionar una información incompleta.
Por ejemplo, cuando la auscultación es normal en los pacientes con sospecha de obstrucción intestinal, la probabilidad de presentarla se reduce sólo un 20%. Además, cuando dos médicos diferentes auscultan el abdomen del mismo paciente, ambos están de acuerdo en el diagnóstico de obstrucción sugerido por la auscultación solo un 30% de las veces.
La importancia de escuchar al paciente
En definitiva, la exploración física debe ser considerada una prueba diagnóstica más y hay evidencia de que no es imprescindible en todos los casos. Al igual que en otras áreas de la práctica clínica está sujeta a una importante variabilidad y su utilidad real depende fundamentalmente de la experiencia del médico y el contexto clínico del paciente.
Sin embargo, sobre lo que sí existe evidencia es sobre el papel de la entrevista clínica. Una relación médico-paciente adecuada debe permitir detectar toda la información relevante y establecer hipótesis diagnósticas.