Frecuentemente se cree erróneamente que las endoscopias digestivas son incómodas y riesgosas, pero la realidad es que hoy en día son procedimientos seguros y bien tolerados.
El SIBO, o sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado, es un fenómeno que puede desencadenar una serie de síntomas gastrointestinales.
En este artículo, exploraremos las herramientas empleadas en procedimientos endoscópicos, centrándonos en la toma de biopsias y la extracción de pólipos.
En esta primera entrega, descubre los secretos detrás de la tecnología que revoluciona la detección y tratamiento de enfermedades digestivas: la endoscopia.
Si es usted de las personas que tienen aprensión a realizarse una endoscopia digestiva, no es el único. A muchos pacientes les asusta porque piensan que puede dolerles.
Uno de los motivos principales que traen a los pacientes a las consultas de un médico digestivo es conocer los resultados de las biopsias de un pólipo extirpado por endoscopia.
La detección de pólipos en el colon durante la colonoscopia es frecuente. Por fortuna, la gran mayoría de estos tumores benignos son de pequeño tamaño y sencillos de extirpar para cualquier médico digestivo.